Caridad obligatoria


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Ahora estamos en Europa osea superpreocupados por los pobres refugiados que llegan al continente huyendo de Siria y otros países en guerra; no es que a nadie le preocupe un carajo esa gente desharrapada, lo que pasa es que ha salido hace poco una foto en los medios de un niño ahogado y se ha puesto de moda entre los progres hacerse los afectados (y por supuesto poco les ha faltado a los políticos para ponerse a la cabeza del rebaño). Así que resulta que tenemos la "obligación moral" de ayudarles, es decir que si un tipo está en la calle no es tu problema pero si salta la valla de tu jardín te conviertes en "moralmente responsable" de lo que te pase. Fantástico, ahora resulta que para esta gentuza la moral está determinada por la geografía. Si cruzas una línea pintada en el suelo ya estás en territorio europeo y hay que ayudarte, si estás en la India y unos bárbaros te van a violar te aguantas.

Y como el dinero y nuestros recursos no son infinitos ¿qué pasa si usted cree que deberían dedicarse a otra cosa? Por ejemplo ¿y si su criterio de ayuda a los demás no es dónde esté la persona sino qué edad tiene (los niños primero, pongamos por caso)? ¿Y si cree que no se debería ayudar a los que vienen sino a los que se quedan en sus países (porque si ayudas a los que vienen favoreces a las mafias que los traen)? ¿Y si su sobrino tiene una enfermedad rara que aquí no se trata y necesita dinero para operarlo en un sitio especializado y si no se muere? ¿Es usted más responsable moralmente del pobre niño ahogado de la foto de moda, que de su sobrino que también se muere si no lo ayudan? ¿Y si usted tiene sus propios criterios morales y no está de acuerdo con ayudar a nadie?

La única diferencia entre destinar sus recursos a ayudar a los refugiados o destinarlos a cualquier otra cosa es que en el primer caso los políticos se lo quitan de su bolsillo por la fuerza (por eso se llama "impuesto") para ayudar a quien a ellos les parece televisivo correcto. Pero moralmente la caridad obligatoria no se justifica. Cada uno da lo que quiere a quien quiere y es tan correcto lo que decida yo como lo que decida otro, por eso nadie tiene dinero a atracar a nadie para imponer sus criterios. La caridad no es un derecho, es un privilegio: el derecho es el de cada uno de ofrecerlo o no a quien decida.