Me recuerda a cuando yo viajé en el vuelo Nueva York-Los Ángeles dos semanas después del 11-S, y éramos tres pasajeros en todo el avión. La situación no deja de ser catastrófica, pero incluso en la guerra hay momentos de calma.
Actualización: me acaban de decir que están cancelando los vuelos desde Madrid a Canarias, así que a lo mejor Ariel se va a tener que buscar algún sitio para dormir en Madrid... Si es que le dejan aterrizar allí. El milenarismo va a llegar.
