Tattoo

El otro día le dije al peluquero que ya estaba cansado de tener pelo y que quería rasurarme la cabeza para volver a la comodidad de mi calva de hace unos años, pero el tipo me convenció para esperar un poco más por si al final cambiaba de opinión. Después pensándolo me acordé de que quizá pronto voy a tener que asistir a una boda en la que estaría bien que tuviera buena presencia (porque los novios quieren que la oficie yo); así que me voy a aguantar por el momento hasta la boda o hasta que se me acabe la paciencia. Lo que ocurra antes.