La huella humana

Lo que les traigo hoy me parece TAN absolutamente impresionante que tengo que ir por partes para explicárselo y pedirles que tengan paciencia para seguirme. Empecemos con esta foto de nuestra galaxia:


La Vía Láctea contiene unas 200.000 millones de estrellas y es de un tamaño de 100.000 años luz (es decir, la luz tarda -a la velocidad de la luz- 100.000 años en llegar de un extremo al otro. ¿Alucinante? Pues sepan que es solo una de las más de 200.000 millones de galaxias que hay solo en la parte del Universo que alcanzamos a ver; y ni siquiera es especialmente grande comparadas con las otras. Pero esperen, que lo bueno viene ahora.

Hace unos 100 años se inventó la radio, y el hombre comenzó a emitir ondas a la atmósfera (y por tanto hacia el espacio). Como las ondas de radio se desplazan a la velocidad de la luz, eso quiere decir que nuestras primeras señales al exterior (en forma de radiación) ahora estarán llegando a una distancia de unos 100 años luz de La Tierra en todas direcciones: o sea, que habrá una "burbuja" de ondas de radio alejándose de nosotros que en estos momentos tiene unos 200 años luz de tamaño. Si hubiera extraterrestres ahí fuera buscando vida inteligente y casualmente estuvieran apuntando sus antenas hacia nuestro planeta, si estuvieran dentro de esa burbuja recibirían esas señales (que empezamos a emitir hace 100 años) pero si estuvieran fuera no podrían porque esas ondas de radio aún no les habrían llegado.

Pues bien, llegamos al meollo de la cuestión. ¿Ven en la imagen esa zona ampliada abajo a la derecha? ¿Y ven esa minúscula burbujita azul? Pues tiene un tamaño de 200 años luz. Esa es la distancia que nuestras ondas de radio han conseguido recorrer desde hace 100 años hasta ahora. Ese es el alcance de las señales que emitimos los humanos al exterior así que, si hubiera extraterrestres en nuestra galaxia buscándonos, fuera de ese puntito no nos podrían detectar todavía. Párense un instante a ver de nuevo la foto en grande, sin aumentar.

Las ondas se seguirán alejando con el tiempo, claro, así que la zona de alcance de nuestras señales (la burbuja azul) se irá agrandando; pero fíjense en el tamaño del que estamos hablando. Quizá para cuando sea lo suficientemente grande, para cuando las primeras ondas de radio humanas lleguen hasta alguien que las pueda escuchar, hayan pasado millones de años y nosotros ni siquiera existamos...

(Tienen la foto original aquí, con algunos comentarios en inglés)

2 comentarios:

  1. Es una buena entrada, en fin se esta perdiendo el tiempo en intentar descubrir si hay extraterrestre ahi fuera, y peor aun que engañen a la gente con la idea de que algun dia la tierra sufrira una invasion de alien, es ridiculo.

    Solo la via lectea es inmensa, si quisieramos ir de un extreno de la via lectea hasta el otro extreno, nos costaria 100.000 años luz cruzarla. ¿y cuando costaria llegar a otras gelaxias? millones de años luz.

    No creo que los alien vivan tantos años como para venir a la tierra, un viaje doble de ida i vuelta.

    No creo que esas ondas de radio lleguen a ningun sitio, porque para eso, dicha onda aun tiene que estan ciando alimentanda desde la tierra.

    La unica forma de explorar el universo e ir a cualquier sitio sin importar la idistancia y el tiempo, es viajando de alguna forma fuera del tiempo.

    Aunque podiaramos viajar a la velocidad de la luz, casi no iriamos a ningun sitio, solo perderce en el espacio, ¿cuantos años aguantarian los materiales de la nave,? y la comida, energia, etc..?

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  2. Hombre, en cuanto a lo de engañar a los crédulos con lo de la invasión estoy totalmente de acuerdo; pero -aunque también es cierto que las posibilidades de encontrar vida inteligente son pequeñísimas- simplemente invertir en ciencia y tecnología del tipo que sea siempre es rentable según nos dice la repetida experiencia histórica. Lo que pasa es que los frutos de esas investigaciones aparecen a muuuuuy largo plazo...

    Dos ejemplos: cuando Faraday "inventó" la electricidad al principio le fueron a echar un rapapolvo porque decían que aquello no servía para nada (y mira hoy lo que sería el mundo sin energía eléctrica); y en los años 1920 se desarrolló una cosa "extraña e inútil" llamada mecánica cuántica... Gracias a la cual hoy tenemos satélites, ordenadores, GPS y un montón de cosas más. La única fe que ha probado una y otra vez que nos sale muy rentable es la fe en la ciencia...

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