Tormenta de píxeles


Muchas veces les he contado que una de mis webs favoritas es El Píxel Anarquista, pero la única cosa que me disgusta es que por su culpa como esto siga así mi lector RSS va a reventar: desde el primer día en que hice click en la fuente de uno de sus post mi lista de webs a seguir ha ido aumentando de tanto tesoro, y ya ha llegado a un punto en que casi me da miedo mirar. Hace unos días justamente citaba Yeray The Retro Gamer, fui a verlo y me encantó, la volví a meter en mi lista de imprescindibles diarios, y me dije: "vale, ya pase lo que pase no meto más". Qué débil soy: ha sido conocer Noirlac, un maravilloso pozo de delicias para un amante del arte pixelado en 8-bits y de los gifs animados, y suscribirme inmediatamente pensando otra vez "ahora sí, ya no más". Sin comentarios.

Suelo traer al blog solo las cosas que más o menos creo que la mayoría entenderá o apreciará, pero déjenme esta vez hacer una excepción porque en Noirlac he visto un detallazo de genialidad que me ha dejado flipando en colores (va para los freaks profesionales). Primero he encontrado un post con esta imagen, que así de primeras me recuerda a los juegos de la vieja saga de Larry:


"Una tienda de licores. ¿Y ahora qué? Beber coñac". Bueno, sigo buceando por el archivo y al rato me encuentro esta otra como si estuviera sacada de cualquier otro juego:



¿Y ahora qué? Beber coñac. Toma detallazo de genio. Y Yeray, por favor, ten piedad... Recuerda que un gran poder conlleva una gran responsabilidad.