Hace unos meses leí sobre el caso de un tipo cincuentón que había descubierto que en realidad no era un hombre, sino una mujer... de 6 años. Si uno acepta que se puede cambiar de sexo ¿por qué no de edad? ¿y por qué no de raza? El otro día estuve escuchando a Vladimir Putin hablando con una periodista y diciendo que entonces él a partir de ahora podía decir que era una ballena azul con superpoderes mutantes y todo el mundo tendría que respetar su decisión y tratarle como a tal.
La entrevista era más larga y en ella Putin mezclaba (en mi opinión injustifidamente) la tendencia sexual con la identidad subjetiva. Sobre lo segundo, que es de lo que va este post, su tesis era que la gente que estaba en esas situaciones sencillamente no estaba mentalmente sana, y que la sociedad podía decidir hasta dónde considerar que algo era "normal" o donde se podía decir que una persona no está bien de la cabeza (sentirse del otro sexo ok, sentirse una ballena azul con superpoderes no); pero que ese límite se establecía arbitrariamente, no porque hubiera una razón lógica que dijera "hasta aquí es sano, a partir de aquí estás pirado". El transexual que ahora dice que tiene 6 años ¿está mitad cuerdo y mitad loco?
Lo que dice Putin tiene una lógica inapelable. Yo defiendo el derecho de cualquier persona a cambiarse de sexo (otra cosa es que me impongan a mí la obligación de pagárselo con mis impuestos), y también me parece perfecto que si alguien que nació hombre y se siente mujer o viceversa los demás le tratemos como se sienta mejor... ojo, no por obligación sino por consideración con un ser humano al que podemos hacer su vida un poquito mejor simplemente con ese detalle. Hasta aquí bien, pero ¿por qué solo con el sexo? Si mañana me cruzo por la calle con un tipo más grande que yo vestido de niña de 6 años ¿le tendré que dar unas palmaditas en la cabeza y comprarle una piruleta? Si solo acepto la parte de ser mujer ¿tengo que tratarla como a una señora mayor?
Usando el sentido común la respuesta es que no, y estoy de acuerdo con Putin en la parte de que el límite lo ponemos porque sí. Como en otras cosas de la vida: aceptamos a los transexuales y no a los transraciales o a los transedad por la misma razón que nos comemos a las vacas y no a los perros. Porque sí. Hoy hemos trazado la línea ahí y mañana podríamos trazarlo en otro nivel, porque sí. La mujer de la noticia de arriba ¿está sana y hay que tratarla como si fuera negra porque a todos los efectos lo es, o en el fondo estamos pensando que un poquito pirada sí que tiene que estar? La niña de 6 años y 100 kilos ¿es una mujer? ¿Es una niña? ¿Le falta un tornillo, medio tornillo o es perfectamente normal? Si yo me siento un dios, ¿tengo derecho a que todo el mundo me trate como a un dios, se postre a mi paso y me haga ofrendas?
En mi caso concreto, mientras a mí no me afecte ni me perjudique tratar a alguien como esa persona se sienta mejor no tengo problema por hacerlo; otra cosa es que lo que opine de su estado mental, pero al fin y al cabo qué más da lo que piense yo y si esa persona se siente bien por mí adelante. Transexual, transedad, transraza... Mientras no me pidas subvenciones, no hagas lobby para obligar a nadie a nada ni fuerces ingeniería social para lavarle el cerebro a la gente, por mí como si quieres ser un cerdo volador. Oink oink, camarada.
