Para qué trabajas


Aquí tienen el original de Dilbert, genialidad absoluta como siempre.

En estos días estoy sacando ratos sueltos para ir poco a poco planificando un proyecto nuevo que me gustaría compartir con mis lectores quizá para mediados del año que viene: se trata de un curso intensivo de programación "para abuelas", incluyendo hacer una web, un programa de escritorio y una app para móviles. Tengo el objetivo doble de meterlo todo en menos de 100 horas (para que se pueda hacer en 2-3 meses dedicándole un par de horitas diarias, o bien en un curso escolar si quieres ponerte solo un par de veces por semana) y además de hacerlo para absolutos ultrameganovatos y ultranegados con los ordenadores, y cuanto más estudio el tema más creo que podría conseguirlo; pero para eso voy a tener que trabajar mucho en las sombras masticando y refinando los contenidos para que lo que les llegue a ustedes sea per-fec-to.

Hablando ayer con uno de mis compañeros sobre el asunto me dijo: "pero ¿te das cuenta de que lo que quieres hacer es un trabajo que tiene mucho valor? Te vas a tirar miles de horas con esto, y si lo consigues vas a tener que meter los contenidos técnicos y además la capacidad que tienes tú de hacer las cosas fáciles. Eso vale una pasta y tú lo quieres hacer gratis". Pues sí, tiene razón. Todavía no tengo al 100% claro que lo vaya a hacer porque será solo si lo puedo combinar con mis otros proyectos (no quiero sacrificar ninguno de mis planes profesionales), pero en caso de que fuera así sería algo creado por puro amor a lo que te gusta hacer. Así que, aunque por supuesto Dilbert lo clava, hay cosas que son trabajo y que tienen otros sentidos.