(Vía WuMo). Si hubiera una siguiente viñeta los perros aparecerían en una manifestación exigiendo que se prohiban los trineos automáticos y diciendo que hay que defender el pan de sus familias y de paso el comercio local, las profesiones tradicionales, los taxistas, las lenguas minoritarias (es decir las que ya la gente no quiere hablar) y demás; y todos esos de la manifestación serían los mismos que dejaron de ir al videoclub de su barrio cuando apareció Netflix. Este cuento ya nos lo conocemos.