Manifestaciones contra el cambio climático, hecho.
Echarse un cubo de agua por encima, hecho.
Sacarse una foto por las niñas secuestradas en África, hecho.
Protestar contra el petróleo en Canarias, hecho.
Je suis Charlie, hecho.
Mensajes de solidaridad con los del terremoto en Nepal, hecho.
Foto de colorines en Facebook por el matrimonio gay, hecho.
¡Uf, cuánto trabajo! Ahora el rebaño está de vacaciones, esperando a que los pastores vuelvan a chiflar para reunirlos de nuevo tras la siguiente pancarta. ¿Qué será? En vista de que lo del apoyo al pueblo griego les ha pillado en verano yo sigo apostando por el alargamiento de pene para los japoneses; pero claro, si nos sale por ahí algún volcán u otro terremoto (pero no en Nepal que ya está fuera de moda, en otra parte y a ser posible un sitio cool) se me estropeará la predicción. Mientras quedes molón y solidario ya vale, y si encima alguien lleva picoteo a la manifa ya ni te cuento...