Esta mañana en el trabajo me he llevado las manos a la cabeza al hablarles a mis compañeros de los ultramegafantásticos y requetesupermaravillosos Palast Orchester. ¿Cómo es posible que en todos estos años no se me haya ocurrido hasta hoy compartir con ustedes esta joya? Bueno, ha llegado el momento de poner remedio a la injusticia: suban el volumen y prepárense para divertirse un rato...