Es su cultura


Quizá mis lectores extranjeros no sepan la que se ha montado estos días en España a cuento de esto. Resulta que una delegación de Irán vino al Congreso de los Diputados español y antes de las reuniones se organizó un saludo protocolario con todos los grupos; hasta ahí todo normal, pero resulta que los iraníes exigieron que las mujeres diputadas españolas no les tocaran, por supuesto ni de broma les estrecharan las manos, y que si les miraban "lo hicieran desde lejos".

Todos los partidos superguays, megafeministas y ultraprogres (es decir, todos menos uno) cuando recibieron la notificación del servicio de Protocolo agacharon la cabeza; pero curiosamente el partido fascista, machista y nazi fue el único que dijo que ni de broma iban a aceptar semejante humillación a las mujeres españolas que encima son representantes de todos los ciudadanos. Se negaron a aceptarlo y reclamaron, y por supuesto dijeron que no iban a asistir a semejante barbaridad. Se levantó un revuelo y por supuesto luego ya hubo otros que se dieron cuenta de que la habían cagado y dijeron "vale, pues nosotros también". Los dos partidos principales de izquierda, que se supone que son los ultrafeministas y blablablá, aún siguen silbando y mirando a otro lado.